Psicología piegetiana
¿Que sabemos acerca de Piaget y la psicología genética? ¿Estaba realmente interesado en mecanismos de aprendizaje? ¿Quería desarrollar una nueva psicología, para diferenciarse de la psicología conductista? A continuación, intentaremos dar respuesta a algunas de las preguntas.
Desde la concepción de la psicología genética, Piaget no estaba interesado en desarrollar nociones acerca de los mecanismos de aprendizaje del niño. De hecho “se ocupó en muy pocas ocasiones de los problemas de aprendizaje y casi siempre con un cierto distanciamiento” (Pozo, 11). “A ciencia cierta la psicología piagetiana se presenta como psicología del desarrollo cognitivo y no del aprendizaje” (Carpeta de trabajo, 28). Es decir que Piaget no se preocupaba en como se sucedía el aprendizaje en el niño sino que buscaba una ciencia que de cuenta de cómo se construye el conocimiento. “Su meta va a consistir entonces, en estudiar cómo crecen, cómo se incrementan los conocimientos, cómo pasan los sujetos de estados de menor conocimiento a estados de mayor conocimiento, encontrar los procesos de formación” (Aportes de Silvia Camean).
Ahora bien, Piaget encontró que el método histórico - crítico utilizado por la epistemología no era suficiente para saber cuáles eran los mecanismos que impulsan el desarrollo del conocimiento, entonces halló en el método psicogenético la respuesta. Piaget es encaminado necesariamente al desarrollo de una teoría psicológica dada la insuficiencia de la psicología de la época, da cuenta que el programa epistemológico surgió en contraposición a la psicología conductista, la cual refería toda explicación a conductas observables. Esta última “realiza (…) una renuncia a explicaciones que apelen a entidades o procesos mentales” (Carpeta de trabajo, 19). Ya que para los exponentes de la psicología conductista, “el aprendizaje es un proceso que se dirige desde ‘afuera’, a partir de la constatación de los hechos de los sujetos y de su refuerzo externo” (Castorina y otros, 4). Según Karmiloff-Smith, “la expresión de los genes como el desarrollo cognitivo son productos emergentes de un sistema autoorganizativo que se ve directamente afectado por si interacción con el ambiente” (Karmiloff-Smith, 1994, 10).
Tal como dice Coll, en la teoría de Piaget, tiene como unidad de análisis “la construcción del pensamiento racional; y el camino utilizado para abordar este problema es la investigación psicológica de las operaciones del pensamiento” (Coll, 1983, 23) .
Acorde a Piaget para construir conocimiento se debe generarse una acción. Ya que todo conocimiento se genera en ella según la teoría piagetiana. Para Piaget, la acción es la interacción entre sujeto y objeto, es decir que “el conocimiento debe ser considerado como una relación de interdependencia entre el sujeto que conoce y el objeto de conocimiento y no como la yuxtaposición de dos entidades disociables” (Carpeta de trabajo, 30). Y los esquemas representan la organización interna de las acciones, estos esquemas asimilan, otorgan significación e interpretan al objeto para poder saber que acción aplicar en un momento determinado. Según Piaget, “lo que permite hablar de esquemas y no de simples movimientos o acciones, es precisamente que las acciones conservan una organización interna cada vez que aparecen” (Coll, 1983, 3).
Según Coll, la psicología genética “además es una teoría del desarrollo que describe la evolución de las competencias intelectuales desde el nacimiento hasta la adolescencia” (Coll, 1983, 23) atravesada por las cuestiones educativas.Bibliografía
- Coll C. (1983) "La construcción de esquemas de conocimiento en el proceso de enseñanza-aprendizaje" en Coll C. Psicología Genética y aprendizajes escolares, Siglo XXI, Madrid.
- Coll, C. (1983) "Las aportaciones de la Psicología a la Educación. El caso de la Psicología Genética y de los aprendizajes escolares" en Coll C. Psicología Genética y aprendizajes escolares, Madrid: Siglo XXI
- Karmiloff-Smith, A. (1994) Más allá de la modularidad, Madrid: Alianza.
- Pozo, J. I. (1989) Teorías cognitivas del aprendizaje, Madrid: Morata.
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